Hoy vamos a hablar de los Radicales libres (R.L.), qué son, cómo se producen, consecuencias para nuestra piel y forma de combatirlos.
El cuerpo humano está formado por miles de millones de células, y estas a su vez por moléculas. Las moléculas son grupos de uno o más átomos unidos por enlaces químicos, y los átomos en su núcleo están rodeados de electrones.
Los electrones se encuentran orbitando los átomos creando un EQUILIBRIO.
Nuestro entorno, nuestra alimentación, el paso del tiempo, nuestras emociones así como el medio en el cual nos desarrollamos son factores que pueden ir en contra del equilibrio de nuestro organismo y acelerar el envejecimiento.
Volvamos a los átomos. Cuando se pierde el equilibrio porque uno o varios de sus electrones se pierden, la molécula pasa de ser ESTABLE a INESTABLE y por tanto altamente reactiva. Su misión es buscar el o los electrones que ha perdido en otras moléculas ESTABLES para obtener su propia estabilidad.
La molécula atacada, a la cual le han robado parte de sus electrones, se convierte en un R.L. y de esta forma se inicia una reacción en cadena que daña a muchas células. ¡¡Empieza el daño celular!!
Estamos expuestos a elemento del medio ambiente que generan R.L, como la polución, tabaco, radiación solar, aditivos químicos en alimentos, pesticidas, estrés y emociones negativas.
El estrés oxidativo es causado por el desequilibrio entre la producción de R.L. y la capacidad de nuestro sistema biológico para neutralizar rápidamente los reactivos intermedios y reparar el daño que causan.
El oxígeno de la atmósfera, y sobre todo el Sol, originan R.L., atacando las células precipitando el envejecimiento celular.
Los R.L. son la causa directa del envejecimiento celular de nuestro organismo en general
La mejor manera de combatir los R.L. es empleando ANTIOXIDANTES, tanto en cosmética como en alimentación. Los Antioxidantes están presentes en VIT C (ácido ascóRbico) y VIT E (pepita de uva), también siendo muy apropiado utilizar tratamientos faciales y cosmética que incluyan el ácido hialurónico, ya que este componente ayuda a humectar la piel, captando agua, y a conseguir un equilibrio, así como reducir arrugas y aportando un volumen natural a la zona en la que se aplica.
El cuidado de la piel es crucial, por eso es necesario conocer cómo actúan los R.L., evitar estrés, contaminación, llevar una dieta sana y tener un cuidado diario de la piel.
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